El pasto natural queda muy bien y tiene que ser bueno, pero tiene múltiples pegas, no todo el tiempo se mantiene en perfectas condiciones el uso y las inclemencias del tiempo lo deterioran con facilidad. Esto se puede observar en los campos de fútbol y béisbol donde el uso intensivo, correr durante los eventos deportivos, lo deterioran por ese motivo necesitan ser cuidados y reparados después de cada evento.
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Pero ahora contamos con el pasto artificial y en los últimos años este ha ido mejorando, en este momento contamos con los de tercera generación, que se asemejan en muchos aspectos al natural, tanto estéticamente como al contacto.
Este tipo de material fabricado por el hombre es utilizado en una variedad de campos deportivos, no sólo para el fútbol y el béisbol, sino incluso para tenis sobre hierba, golf y hockey o simplemente para decorar la parte delantera de nuestro hogar y así resulte perfecto durante todo el año. Otras aplicaciones muy populares hoy en día es su instalación en parques infantiles y parques para perros.
El pasto artificial es muy recurrido por muchos arquitectos y en proyectos comerciales que requieren de paisajismo e incluso los propietarios de viviendas que no tienen tiempo para cuidar el pasto natural. Hay muchos beneficios al utilizar el pasto artificial ya que requiere menos mantenimiento, no crece de altura y así no hay necesidad de recortar la hierba, además no necesita estar constantemente regado y no se deteriora ni por el uso ni por las inclemencias del tiempo.
Es la herramienta decorativa para exteriores perfecta, muy económica y de fácil instalación y si le preocupa que se encharque los días de lluvia, puede estar tranquilo ya que cuentan con la mejor tecnología de drenaje que hay hoy en día. Olvídese de los caros tratamientos para mantenerlo en condiciones y lo mejor de todo es que se amortiza en muy poco tiempo.